Una sonrisa muy especial

Dislexia

DISLEXIA:

MAS INFORMACION

      Concepto de dislexia:

Se refiere a aquellas personas que tienen una dificultad en los mecanismos específicos de lectura en ausencia de un déficit intelectual.

En términos neurológicos se considera dislexia a aquellos casos en que el déficit lector se produce por algún tipo de disfunción cerebral.  Puede producirse antes de que el sujeto haya adquirido la lectura o después, por lo que se distinguen dos grupos: DISLEXIAS ADQUIRIDAS Y DISLEXIAS EVOLUTIVAS.

      DISLEXIAS ADQUIRIDAS:

Engloba aquellos sujetos que, habiendo logrado un determinado nivel lector, pierden en mayor o menos grado, como consecuencia de una lesión cerebral alguna de las habilidades que poseía.

Las lesiones cerebrales raramente destruyen todas las capacidades lingüísticas, lo normal es que alteren ciertas habilidades pero que el resto funcionen bien. Partiendo del supuesto de que la lesión cerebral no creará nuevos mecanismos de procesamiento, el lenguaje de los pacientes afásicos se puede considerar como resultado del sistema del lenguaje total menos cierto(s) componente(s). Referimos los diferentes tipos de dislexias producidas por lesión de alguno de los procesos componentes del sistema de lectura:

• DISLEXIAS PERIFÉRICAS:

Durante algunos se creyó que la dislexia se producía porque la lesión afectaba al control de los movimientos oculares. Pero Stanley comprobó que los sujetos disléxicos tenían peor control oculomotor que los lectores normales, pero no mostraban diferencias en tareas de búsqueda. Parece probable entonces que los patrones de movimientos de los ojos en la lectura sean el resultado de la dificultad de ejecutar la tarea, más que la causa.

            El estadio de análisis visual sí que parece responsable de algunos tipos de trastornos lectores, aunque no padecen ningún déficit perceptivo. Estos sujetos tienen dificultades para identificar letras y palabras, pero no para identificar otra clase de estímulos. Vellutino afirma que estos trastornos se producen porque no tienen una buena representación de la palabra y de ahí que no consigan identificarla.

Dentro de las dislexias periféricas se distinguen tres categorías:

• Dislexia atencional: Pueden reconocer tanto las letras aisladas como las palabras globalmente, pero son incapaces de identificar las letras cuando forman parte de una palabra.
• Dislexia visual: Errores de tipo visual: leen “sol” donde dice “sal”. Generalmente las palabras que producen como respuesta suelen tener una mayor frecuencia de uso que las que tienen presente.
• Dislexia letra a letra: Para leer una palabra los pacientes tienen que nombrar cada una de las letras que la componen. “m,a,n,o…mano”. La longitud de la palabra es una variable influyente.

 

• DISLEXIAS CENTRALES:

Existen pacientes que sin ningún problema perceptivo son incapaces de reconocer las palabras. El trastorno se produce por alteraciones en las rutas de acceso al significado, y un función de cuál sea la ruta lesionada se hablará de distintos tipos de dislexias.

• Dislexia fonológica: Leerá las palabras familiares a través de la ruta visual pero lo hará con dificultad las palabras desconocidas y las pseudopalabras, ya que para éstas no dispone de una representación en el léxico visual que le permita su reconocimiento.

La dificultad para leer pseudopalabras no se debe a problemas articulatorios o problemas perceptivos, porque identifican las letras que componen las pseudopalabras.

Lo cierto es que estos pacientes no constituyen un grupo homogéneo. Puede haber diferentes tipos de dislexia fonológica dependiendo de cuál es el subcomponente alterado. En castellano, no todos los grafemas equivalen a letras, alguno están formados por más de una letra, con lo cual es necesario realizar el agrupamiento  de las letras en grafemas antes de llevar a cabo la conversión en fonemas. Existe al menos tres estadios:

            – Análisis grafémico En cuanto a las pseudopalabras, algunos pacientes tenían más dificultades para leer aquellas que requerían de un análisis grafémico que para las pseudopalabras en las que existía una correspondencia una a una entre letras y fonemas (leen “cheque” como “ceheque”).

– Asignación de fonemas: Nombraría las letras y las escribiría al dictado pero sería incapaz de producir su sonido.

– Combinación de fonemas: La lectura de palabras consistiría en secuencias de sonidos correspondientes a los grafemas componentes. Su problema radica en la incapacidad para combinar sonidos.

 

Los disléxicos fonológicos suelen padecer otros trastornos de lectura: ERRORES DERIVATIVOS (leer “apareció” en vez de “aparición”) y LOS CAMBIOS EN LAS PALABRAS FUNCIONALES  (“en” por “de”). En la tan debatida cuestión de si reconocemos las palabras familiares globalmente o tenemos que identificar previamente sus letras componentes, datos parecen apoyar la hipótesis de la identificación previa de las letras, ya que si realmente los sujetos reconociesen las palabras por su forma global tendrían que ver seriamente dañada su lectura en estas condiciones (aLtErNaDaS).

• Dislexia superficial: No tienen dificultades con las palabras regulares, pero son incapaces de leer correctamente las palabras irregulares. Esta dislexia puede surgir por lesiones en varios puntos:

– En el léxico visual: No podrá acceder al significado de las palabras irregulares mediante la  lectura, pero sí a través del lenguaje oral, porque su sistema semántico está intacto. Y son incapaces de señalar cuál es el significado que corresponde a las palabras homófonas (“vaca”, “baca”).

–    En el sistema semántico: Problemas para entender palabras escritas y para entender las palabras orales e incluso para hacer uso de ellas en producción.

–    El léxico fonológico: Pueden comprender las palabras irregulares (sistema semántico intacto) pero si se les pide que las lean en voz alta tienen que recurrir a la ruta fonológica produciendo los consiguientes errores de regularización. Acceden al significado de las palabras por su forma ortográfica y no por su pronunciación.

 

• Dislexia semántica: Si el deterioro se localiza en la conexión del léxico visual con el sistema semántico, podrá leer palabras a través de la ruta visual, gracias a la conexión del léxico visual con el fonológico, pero no podrá recuperar su significado.

 

• Dislexia profunda: Trastorno que abarca ambas rutas, visual y fonológica produciendo dificultades para leer pseudopalabras y para acceder al significado. El síntoma característico son los errores semánticos, consistentes en decir una palabra por otra con la que no guarda ninguna relación visual, aunque sí semántica (“mar” donde dice “océano”).

También en la profunda el trastorno en la ruta visual se puede producir en diferentes componentes. Shallice y Warrington hablan de dos tipos según el componente dañado: El léxico visual y El léxico fonológico: No son capaces de acceder al significado de las palabras desde el léxico visual y sí desde el auditivo. Ej: al explicar la palabra escrita “miel” dice: “pequeño animal que vuela” (refiriéndose a la abeja) y cuando se le pregunta de forma oral la definía correctamente.

            Para explicar los errores semánticos hay que suponer que está dañada la conexión entre el léxico visual y el léxico fonológico. Sólo puede leer a través del sistema semántico.

La dificultad de los disléxicos profundos para reconocer palabras  abstractas es porque las palabras están organizadas en el sistema semántico por categorías, y una es la de palabras concretas y abstractas. Dificultad en activar esa categoría.

Algunos disléxicos superficiales y profundos (los que tienen el trastorno en un módulo posterior al léxico semántico) también tendrán dificultades para recuperar las palabras en el habla. Parece que estos pacientes tanto en el lenguaje oral, como en el escrito consiguen acceder al sistema semántico, pero tienen dificultades para recuperar la entrada en el léxico fonológico.

      DISLEXIAS EVOLUTIVAS:

 

“Desorden que se manifiesta en la dificultad de aprender a leer a pesar de una instrucción convencional, inteligencia adecuada y oportunidades socioculturales”.

            Muchos neurólogos sostienen que sufren algún tipo de alteración cerebral, y aunque no son concluyentes, existen bastante datos obtenidos a nivel neuroanatómico que parecen confirmar esta hipótesis. Se han encontrado diferencias en las asimetrías hemisféricas respecto a los sujetos normales y anormalidades en la formación de la corteza cerebral.

            Si las dislexias evolutivas también son consecuencia de disfunción cerebral también aquí se encontrarán los mismos subtipos de dislexia que en las adquiridas. En cambio otros autores opinan lo contrario.

Los disléxicos evolutivos tampoco constituyen un grupo homogéneo. Los déficit que se han encontrado en cada uno de los procesos que componen el sistema de lectura son:

      Déficits en los procesos perceptivos: Anomalíasen el control oculomotor de los niños disléxico, pero tampoco está claro si son la causa o el resultado de las dificultades lectoras. Muchos trabajos experimentales han puesto de manifiesto que el problema de los niños disléxicos es lingüístico más que perceptivo. El fallo no se produce en la percepción sino que es más central. Posiblemente conocen laspalabras por sus rasgos visuales globales y cuando se encuentran con alguna palabra que puede tener una forma más o menos parecida con otra de la que poseen representación léxica la identifican enseguida con ella.

Aún cuando los niño disléxicos puedan tener una percepción visual normal, su ejecución en la identificación de letras es inferior a la de los normales.

      Déficits en el reconocimiento de palabras: Es en el procesamiento léxico en el que se encuentran las mayores diferencias entre niños disléxicos y normales. Se pueden producir por incapacidad de hacer uso de la ruta fonológica; en otros casos de la ruta visual y en otros por dificultades en ambas rutas. Hay similitud con los subtipos descritos en las dislexias adquiridas (fonológica, superficial, profunda…). Aún así el hecho de que un disléxico evolutivo lea peor las pseudopalabras que las palabras no es razón suficiente para etiquetarlo de disléxico fonológico, ya que también los lectores normales leemos peor las pseudopalabras y no por eso se nos clasifica de fonológicos.

      Déficits en el procesamiento sintáctico: Algunos niños disléxicos poseen menor capacidad para retener información en la memoria a corto plazo o memoria operativa que los lectores normales. Tendrán dificultades para relacionar entre sí las palabras y formar la correspondiente estructura sintáctica.

Pero incluso teniendo una memoria operativa normal, pueden tener mayores dificultades para realizar el procesamiento sintáctico porque están más tiempo detenidos en el reconocimiento de las palabras y ello implica que tienen más tiempo su memoria ocupada.

Por otra parte, el problema de algunos niños radica en la capacidad de usar adecuadamente las claves sintácticas (organizar coherentemente las palabras) a pesar de tener una inteligencia normal y unos procesos de reconocimiento de palabras en estado perfecto.

También tienen dificultades con las oraciones pasivas (tienden a asignar Sujeto-Verbo-Nombre cuando se encuentran con Nombre-Verbo-Nombre) y las subordinadas de relativo ( ya que tienden a asignar al primer nombre el papel de sujeto de todos los predicados que aparecen en la oración).

      Déficit en el procesamiento semántico: Puede tener dos causas:

• Porque el sujeto no es capaz de organizar los conceptos del texto en una estructura coherente.
• Porque son incapaces de integrar esa estructura en sus conocimientos.

La comprensión de un texto requiere  un reconocimiento complejo del mundo y experiencias, y muchas veces los lectores son incapaces de comprender un párrafo o texto porque no poseen los conocimientos necesarios para su comprensión.

1. 7.     ETIOLOGÍA DE LA DISLEXIA EVOLUTIVA

Podemos agrupar tres grandes categorías distinguiendo entre las concepciones tradicionales y las actuales.

1. 1. PERSPECTIVA TRADICIONAL (hasta los años 60):

 

   LA DISLEXIA COMO UN TRASTORNO PERCEPTIVO VISUAL

Las teorías tradicionales estaban sesgadas por la suposición de que la lectura es una habilidad visual compleja cuya principal demanda consiste en diferenciar y reconocer estímulos visuales (Hinshelwood, Morgan). Orton buscó las bases neurológicas de los comportamientos lectores anómalos a los que denominó ESTROSIMBOLIA o INVERSIÓN DE LOS SÍMBOLOS (dominio de un hemisferio cerebral sobre otro). Herman sugirió más tarde una disposición innata hacia la confusión espacial y direccional.

      También fue muy popular la noción de la existencia de un déficit modal cruzado o intermodal. (déficit en la conexión entre los diferentes sonidos, siendo la más común la de vista-oído).

      Como consecuencia se dio gran importancia a las actividades dirigidas a mejorar la percepción y discriminación visual, al afianzamiento de la dominación lateral, etc. Pero la investigación ha puesto de relieve que no tienen una relación directa con los trastornos de lectura, ya que no son predoctoras del aprendizaje de la lectura ni explican la mayoría de los errores de ella.

      Sólo un reducido número de niños con DAL sufren disfunciones perceptivas que impiden el reconocimiento, la discriminación, la identificación o la memorización de las formas visuales. Se puede afirmar que los problemas perceptivo-visuales no parecen ser la causa principal de estas diferencias.

      Otras teorías defendieron que la causa de las dificultades de lectura podría ser una deficiente memoria a corto plazo del orden secuencial.

      En la actualidad, estas teorías van teniendo cada vez menos popularidad. Pavlidis encontró en los disléxicos un deficiente control de sus movimientos oculares, interpretándolo como la causa, pero se ha probado que ello puede ser más un efecto que una causa del problema. Ha sido interpretado en el sentido de que procesan con mayor lentitud la información que les llega por vía visual.

      Estos niños presentan problemas en los aspectos perceptivo-visuales sólo en tareas de lectura y no en el resto de actividades de su vida cotidiana. Por lo que podría ser más consecuencia que causa.

  PERSPECTIVA NEUROBIOLÓGICA

Las áreas de mayor interés son los estudios genéticos y los neuroanatómicos.

      En las investigaciones genéticas hay una observación de una mayor presencia del trastorno en niños que en niñas. Además hay mayor probabilidad de encontrar personas que hayan padecido dificultades lectoras en las familias de los disléxicos que en la de los lectores normales (Yule y Rutter). También hay estudios de concordancia genética con gemelos: cuando comparten el genotipo, si uno de los dos hermanos padece dislexia existe una altísima probabilidad de que el otro gemelo lo sufra también. El porcentaje baja con los gemelos dizigóticos. La predisposición genética parece probada en el caso de la dislexia.

      Otros estudios ponen más énfasis en la existencia de alteraciones neuroanatómicas y su relación con la dislexia (Ej: relación entre trastornos de lectura y el síndrome de Gerstman, que presentan discalculia, problemas de lectoescritura y orientación e identificación).

      Otros estudios (Galaburda) señalan la existencia de un fallo en lamigración normal de las células nerviosas a la corteza. Supone un área de Wernicke más pequeña de lo normal. Algunas hipótesis anatómicas no han podido ser confirmadas.

      Los estudios neurobiológicos están actualmente en fase de expansión.

72. PERSPECTIVA ACTUAL:

   PERSPECTIVA PSICOLINGÜÍSTICA: LA DISLEXIA COMO UNA ALTERACIÓN DE LA DECODIFICACIÓN FONOLÓGICA

Existe evidencia de que los niños que presentan un retraso en la adquisición del lenguaje experimentan dificultades en la lectura seis veces más que los niños con un desarrollo normal. Además, los malos lectores ejecutan peor una serie de habilidades verbales que implican la producción, percepción, comprensión, segmentación del lenguaje o la memoria lingüística, mientras que apenas existen diferencias cuando se utilizan tareas que no implican el uso del lenguaje.

Estas observaciones apuntan a la influencia de las habilidades lingüísticas en la lectura y han originado los nuevos enfoques que situan el origen de las dificultades lectoras fundamentalmente en estos aspectos.

   Los problemas lingüísticos que tienden a encontrarse en los niños con DAL pueden situarse dentro de dos categorías:

–          Procesamiento del lenguaje hablado. Mann distingue cuatro niveles:

• Necesitan habilidades finas de percepción del habla que posibilitan distinguir palabras que se parecen mucho entre sí.
• Habilidades de vocabulario, principalmente denominación rápida, para poder acceder inmediatamente al significado de las palabras.
• Tener una adecuada memoria verbal a corto plazo
• Ser capaces de detectar la estructura sintáctica y semántica de las frases y oraciones. Los malos lectores manifiestan deficiencias en todos estos aspectos del procesamiento lingüístico, exceptuando los semánticos.

 

–          Conocimiento fonológico: Se ha demostrado que la conciencia fonológica juega un relevante papel tanto en la adquisición y desarrollo de la lectoescritura como en las dificultades lectoescritoras. Se cree que el momento clave en las dificultades de reconocimiento de palabras sería un déficit fonológico.

Una falta de conocimiento fonético es responsable de que el inicio del aprendizaje de la lectura sea difícil para todos los niños en general y muy difícil para unos pocos. Tales errores no suelen implicar confusiones visuales, inversiones de letras o de secuencias de letras, sino un problema en la integración de la información fonológica que transmiten los símbolos visuales, que no actuarían como señales del sonido. Esto explicaría que tienden a pronunciar correctamente la primera letra de la palabra, pero tienen dificultad con las letras subsiguientes al no encontrar fácilmente sus correspondencias sonoras.